Los profesores Raúl Núñez (PUCV) y Paulo Román (UC) fueron los ponentes de la quinta sesión del ciclo de coloquios sobre el reimpulso a la Reforma Procesal Civil organizado en conjunto por el Departamento de Derecho Procesal y el Programa de Reformas a la Justicia UC, que abordó el Sistema Recursivo en el Nuevo Proceso Civil, específicamente el Nuevo Recurso de Casación.

El primero en exponer fue Raúl Núñez quien consideró “arriesgado haber hecho una apuesta sobre un recurso que tomará la Corte Suprema”, entendiendo que la Convención Constitucional puede realizar cambios a la institución. “El tamaño de la Corte y su función que le asignará la Constitución es materia de la Convención Constitucional”.

Respecto al recurso de casación, el cual en su forma busca proteger la legalidad de la decisión, el profesor Núñez afirmó que “este recurso es solo de casación en el fondo, pero en la forma no es casación, sino que es una forma de hacer efectiva o hacer valer la nulidad procesal”. En este sentido, afirmó que el proyecto de reforma “no parece ser una mala solución”.

Sobre la causal de procesamiento de la sentencia donde, agrega Núñez, se hubiere incurrido en uno o más errores de derecho que hayan influido sustancialmente lo dispositivo al fallo, aclaró que aquí es donde se nota más la causal de recurso de casación de fondo. Sin embargo, afirmó que provoca cierta confusión cuando “se habla sobre los filtros de acceso: in limine y de unificación”.

“Creo que el recurso de casación es en realidad un recurso de unificación y que el filtro de acceso convertiría de facto la casación en un recurso de unificación”. Asimismo, añadió que en “esta figura mixta que tenemos de recurso de casación primará la uniformidad o la unificación por sobre la casación en sentido estricto”.

Por su parte el profesor de Derecho UC Paulo Román aseguró que la reforma al proyecto sobre el recurso de casación está concebido para que “nadie más que la Corte Suprema invalide el procedimiento y la sentencia, o solo la sentencia”.

Respecto a los plazos para dictar fallos que tiene la Corte, Román culminó indicando que “hoy en día son más bien teóricos de entre 20 a 40 días dependiendo del tipo de casación que se haya aducido”. En este sentido, aclaró el profesor, que “la reforma entusiasma mucho pero no queda claro cómo se volverá operativa con los recursos que hay hasta hoy”.