La jueza Wendy Jane Abraham del Tribunal Federal Australiano declaró “elegible” para extradición a Chile a Adriana Rivas, secretaria de Manuel Contreras, y acusada de participar en la desaparición de siete personas, una de ellas embarazada, durante la dictadura de Augusto Pinochet.

Tras declarar desestimar la apelación presentada por la defensa de la secretaria del ex jefe de la DINA contra el fallo emitido el 29 de octubre, Rivas podría ser trasladada a Chile y deberá pagar los costes legales del Estado chileno, que representó a Chile para pedir la extradición, según ordenó la jueza.

Sin embargo, aún puede ser apelado ante el pleno de los magistrados del Tribunal Federal Australiano, aunque solamente basándose en la posibilidad de que exista un error en la interpretación o aplicación de la ley, explicó a la agencia EFE la abogada Adriana Navarro, quien representa a los familiares de seis de las víctimas atribuidas a Rivas.

A Adriana Rivas se atribuye su participación en el “secuestro agravado” de Víctor Díaz, subsecretario del Partido Comunista de Chile, en 1976, además de la desaparición de Fernando Navarro, Lincoyán Berríos, Horacio Cepeda, Juan Fernando Ortíz, Héctor Veliz y Reinalda Pereira, quien estaba embarazada.

Es por ello que la mujer de 68 años desde febrero del año pasado, se encuentra con prisión preventiva en una cárcel de Sydney, donde niega haber participado en torturas o asesinatos.