La Tercera Sala de la Corte Suprema estableció que la malla extensora utilizada para expandir vasos constreñidos, corresponde a un insumo y no a una prótesis.

La decisión fue tomada luego de analizar el recurso de protección presentado por un afiliado en contra de isapre Cruz Blanca SA. De esta manera, la Suprema ordenó recalcular la cuenta cobrada por la instalación de un stent (malla extensora), dispositivo catalogado erróneamente como prótesis.

La resolución agrega: “Que, tal como expresa el informante, el ‘stent’ corresponde a un dispositivo que permite mantener abierto un vaso previamente estenosado, dispositivo que fue utilizado en el recurrente en la operación quirúrgica a la que fue sometido a propósito de un infarto agudo al miocardio. Que no obstante calificar tal artefacto como una prótesis, e indicar que este reemplaza el segmento de la estructura que no puede cumplir con la función por sí sola, dicho artefacto no sustituye materialmente algún miembro, órgano o parte del cuerpo”.

Para la Sala Constitucional: “(…) de lo anterior, no cabe sino concluir que el stent aplicado al recurrente constituye un insumo, debido a que no tuvo la aptitud de reemplazar ningún miembro u órgano de ella, por lo que el actuar de la Isapre recurrida, en cuanto otorga sólo una cobertura de hasta 20.00 U.F. a dicho procedimiento quirúrgico, al estimarlo una prótesis y no un insumo, carece de sustento y resulta, por ende, arbitrario, afectando con ello la garantía prevista en el N°24 del artículo 19 de la Carta Fundamental, en cuanto se impide al actor obtener el porcentaje de bonificación que para dicha prestación se encuentra estipulado en el contrato de salud respectivo”, detalla el fallo de la causa rol 6.806-2021.