En noviembre de 2018, el tribunal de Mar del Plata, en Argentina, decidió absolver por homicidio y abuso sexual a los dos acusados de violar y matar a Lucía Pérez, de 16 años, crimen que en 2016 se convirtió en el símbolo del movimiento en contra de la violencia machista contra las mujeres en todo América Latina.

Fue durante las últimas horas, que se conoció que La Cuarta Sala del Tribunal de Casación Penal de la provincia de Buenos Aires determinó anular el fallo, pues según los jueces Fernando Mancini, Carlos Ángel Natiello y Mario Eduardo Kohan «todos los extractos citados del fallo, y los elementos tenidos en cuenta por los juzgadores, exponen claramente que el mismo se fundó en intolerables prejuicios y suposiciones basados en estereotipos de género».

«Se demuestra el androcentrismo del derecho: descartaron el eventual abuso sexual respecto de Lucía, porque ella era una chica con personalidad fuerte», añadieron, según consignó Infobae.

Asimismo, se añade que «el Tribunal, inexplicablemente se enfoca en indagar en la personalidad, actitudes y comportamientos anteriores de la víctima, su forma de relacionarse con los hombres, su vida social, su carácter, en distinguir la conducta de los imputados, y a partir de allí, considerar si Lucía había consentido el acceso carnal».

 

ANTECEDENTES DEL CASO

Según lo informado por Clarín, en 2018, Matías Farías (25) y Juan Pablo Offidani (43) fueron condenados a 8 años de cárcel y una multa por tenencia y comercialización de droga, agravado por la venta a una menor de edad.

Ambos fueron absueltos por la violación y el asesinato de la adolescente “por no haberse probado en el debate”, según lo señalado por los jueces. Tampoco se establecieron los cargos en contra de Alejandro Maciel (61), quien estaba en el juicio por el delito de encubrimiento.

Además de esto, el tribunal pidió investigar a la fiscal María Isabel Sánchez, quien una vez conocido el crimen habló del «empalamiento» en el cuerpo de la adolescente hecho que desató la indignación en el país trasandino.

El persecutor Daniel Vicente había pedido prisión perpetua para Farías, mientras que para Offidani solicitaba 18 años de prisión.

En declaraciones al mismo medio en esa fecha, Guillermo Pérez, el papá de Lucía, afirmó que “es una vergüenza el fallo, una fantochada. Este tribunal no entiende nada de violencia de género”.

La investigación estableció que el 7 de octubre de 2016 los imputados se acercaron a la víctima para venderle un cigarrillo de marihuana. A la mañana siguiente se la llevaron de su casa, momentos en que habría sido agredida sexualmente. Luego la trasladaron sin signos vitales a un centro hospitalario, donde se verificó el fallecimiento.