Así describe su experiencia en el Juzgado de Policía Local de Providencia la microempresaria Daniela Iturriaga, quien demandó al diseñador de su sitio web, el que presentaba falencias. Inició el proceso hace dos meses y tendrá que esperar una resolución el 27 de noviembre, fecha en que quedó fijada su audiencia.
El retraso en la solución de asuntos por parte de los juzgados de policía local es criticado por la ciudadanía.
Stefan Larenas, presidente de la Organización de Consumidores y Usuarios (Odecu), dice que estos juzgados ‘tienen trabajo que muchas veces es simple, de menor cuantía, pero uno tiene que esperar un año para que haya un fallo’.
Cerca del 90% de las infracciones que se tramitan en estos juzgados son por faltas a la Ley de Tránsito y deudas de tag. El gerente de Movilidad y Políticas Públicas de Automóvil Club, Alberto Escobar, dice que este tipo de multas saturan los juzgados. ‘Son infracciones que no debieran ser objeto de un posible alegato. Debieran ser binarias, automáticas’, explica.
Una institución ‘muy única’, según estudio
‘A nivel latinoamericano, no hay nada como esto. Es algo muy único, muy anómalo’, señala Marcos Fandiño, director del área de proyectos del Centro de Estudios de Justicia de las Américas (CEJA), organismo dependiente de la OEA, y uno de los autores de la investigación que examina el funcionamiento de estos tribunales.
Estos organismos dependen de la municipalidad respectiva, bajo la supervigilancia del Poder Judicial. Es responsabilidad de los municipios administrar su situación financiera. Según CEJA, esto explica la asimetría entre los juzgados. ‘Los hay con un nivel muy alto, con sistemas tecnológicos muy sofisticados, pero existen algunos que no tienen ni siquiera conexión a internet, con muchas deficiencias de infraestructura’, dice Gonzalo Fiblas, coautor del estudio.
Disparidad y sobrecarga por comuna
Vanessa Rodríguez es procuradora y dice conocer todos los juzgados de policía local de Santiago. Empleada de un banco, su trabajo es entregar los escritos de todos los partes cursados en los estacionamientos que arrienda su empleador.
‘Todos funcionan distinto. En los (juzgados) civiles o de familia te encuentras la misma estructura, pero acá no. Cada juzgado tiene sus mañas, yo sé en cuál me voy a demorar más. Con los del sector oriente no es tanto problema como en el de Maipú, por ejemplo’, dice.
Desde Odecu también creen que existe una disparidad entre los tribunales. ‘Si yo voy a un juzgado de una comuna pobre, no voy a tener la misma atención ni la misma prioridad que en Las Condes o La Reina’, dice Larenas.
Según el estudio de CEJA, al depender de recursos municipales, los juzgados tienen poca capacidad para contratar más personal. Esto provocaría sobrecarga laboral y retrasos en la solución de trámites.
Janet Concha, vecina de La Florida, ejemplifica con su caso. Acudió al juzgado de policía de su comuna para apelar un parte por auto mal estacionado, pero fijaron la audiencia para dos semanas más. ‘Te mandan de un lado a otro y al final te dan otra fecha. Tendré que revisar de nuevo el calendario para ver si tengo o no turno’, dice.