“Histórica”, así es calificada la audiencia de formalización de cargos contra, el suspendido fiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias, ya que sería el primer fiscal regional formalizado en la historia judicial de Chile.
A tempranas horas de la mañana de este viernes se dio inicio a la inédita formalización, donde por primera vez Arias se sentaba en el banquillo de los imputados, mientras su par de Magallanes, Eugenio Campos, le adjudicaba la autoría en delito informático y violación de secreto.
En la audiencia. Campos expuso una serie de conversaciones de WhatsApp -desde el teléfono institucional- en la que su hermana le solicitaba una ficha de un presunto narcotraficante, obtenida desde el Sistema de Apoyo de Operación (SAO), la cual Arias le habría compartido a través de la red social.
Dicha persona habría estado vinculada con el sobrino del persecutor, que fue denunciado por su propio padre, quien para ello utilizó la información entregada por Emiliano Arias.
En ese contexto, el fiscal Campos señaló a la jueza que aquí se constituirían dos ilícitos: violación de secreto y delito informático.
A lo que la defensa de Arias, el abogado Marcos Contreras, alegó que las evidencias del caso solo constituiría el delito informático, considerando que el persecutor tenía acceso autorizado a la plataforma SAO. Del mismo modo, la defensa acusó que funcionarios estaban señalando presiones de la Fiscalía durante el proceso administrativo, donde incluso uno de ellos -cuyo nombre no fue transparentado- habría iniciado tratamiento psicológico a raíz de la situación.
Planteados los argumentos, la Fiscalía pidió cuatro meses de investigación, pero el Tribunal otorgó finalmente seis meses, en cuyo periodo Arias no tendrá medidas cautelares.
La investigación penal contra Arias inició en abril de este año a raíz de la denuncia que por ese entonces hizo el también hoy suspendido fiscal adjunto de O’Higgins, Sergio Moya, en las que acusó una serie de irregularidades por parte de su superior jerárquico. Alguna de ellas ligadas a violación de secreto, trato preferente con abogados y tráfico de influencias.
En la arista administrativa, en tanto, esta semana el fiscal nacional, Jorge Abbott, resolvió iniciar el proceso de remoción de Arias tras de analizar el informe del sumario que formuló cinco cargos y propuso la destitución del persecutor, quien tachó la decisión de «ilegal y arbitraria» y anticipó que no renunciará a más de 19 años en el organismo.
Pide entrega de iPhone 8
Contreras puso en discusión una serie de cautelas de garantía, en la que principalmente se apuntó a la entrega voluntaria del teléfono institucional, un iPhone 8 que le había asignado Fiscalía para sus labores.
Desde ese dispositivo Campos tuvo acceso a la conversación que citó en la audiencia de formalización, el cual permanece incautado como medio de prueba de la investigación.
La disputa ha escalado durante meses, por lo que este viernes pidió nuevamente que el persecutor lo devuelva a Fiscalía, no a manos de Arias, sino que al sistema administrativo de Fiscalía; o bien, sea puesto bajo custodia, consigna Biobio Chile.
Contreras apuntó a sus temores de que el dispositivo sea mantenido como rehén ante una posible medida intrusiva al teléfono.