El 28 de agosto, María Luisa Brahm asumirá como nueva presidenta del Tribunal Constitucional. En su nuevo rol, la exjefa de asesores del segundo piso del Mandatario Sebastián Piñera deberá enfrentar la propuesta de reformas al TC que el Jefe de Estado anunció en marzo tras el crítico discurso del presidente de la Corte Suprema, Haroldo Brito, en el inicio del año judicial.
A cinco meses de ese compromiso nadie conoce el alcance de las medidas que busca implementar el Ejecutivo.
Parlamentarios y constitucionalistas sospechan que La Moneda no busca ir más allá de una revisión de la forma en que se designan los ministros, tal como lo planteaba el programa de gobierno.
Mientras, desde el Congreso crece la presión por una reforma mayor que incluya la supresión del control preventivo de las leyes.
La supresión del control preventivo de las leyes es una materia en la que coinciden los parlamentarios de oposición con el grupo transversal de 16 constitucionalistas liderados por el abogado Gastón Gómez (cercano a RN) que en julio emitió un informe que propone 25 reformas al TC.
La transversalidad del equipo de abogados es su mayor activo y desde ahí ha buscado difundir su informe en el Congreso y en el Ejecutivo.
Hoy el grupo será recibido por el expresidente Ricardo Lagos y se espera que esta semana RN haga suya la propuesta y se la presente al gobierno.
Asimismo, Gómez comprometió su apoyo técnico a la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados que preside Matías Walker (DC).
Además de Gómez integran el equipo: Isabel Aninat (CEP), Martín Canessa (Universidad Católica), Luis Cordero (U. de Chile), Gloria de la Fuente (Fundación Chile 21), Arturo Fermandois (UC), Jaime Gajardo (UDP), Patricio Zapata (UC) y José Francisco García (UC), entre otros. Teodoro Ribera trabajó en propuestas antes de ser nombrado canciller.
‘No tengo claro que se incluya el control preventivo. Y esa idea es bien central.
Hay consenso extendido en cuanto a eliminarlo. Ese es un buen test para ver si estamos ante un pequeño ajuste o una reforma’, dice el abogado Patricio Zapata.
Walker sostiene que el gobierno no ha dado señales de que tiene interés de impulsar un cambio profundo al TC y por eso agilizó el trámite de proyectos relativos al tribunal.
El abogado constitucionalista Tomás Jordán -quien estuvo a cargo del proceso constituyente del gobierno de Bachelet- plantea hacia dónde cree que debe apuntar la reforma: ‘Hay una premisa central en la reforma al TC: afirmar su carácter jurisdiccional. Esta se debe expresar en tres reformas esenciales: establecer mecanismos transparentes y deliberativos de nombramiento; eliminar el control preventivo de leyes para sustraerlo del proceso político legislativo y ser el órgano que resuelva las competencias entre autoridades regionales y nacionales’.
Fuente: La Tercera