La tendencia de fallos de la Corte Suprema a favor de los trabajadores se ha mantenido, pero con signos de moderación en el último tiempo. Eso es lo que muestra un informe del estudio especializado en consultoría y litigios laborales Munita & Olavarría, que analizó estadísticas del Poder Judicial (PJUD) sobre recursos de unificación de jurisprudencia de la Cuarta Sala mixta (laboral) de la Corte Suprema.
El análisis revela que en 2017 el criterio pro trabajador fue más marcado: de un total de 151 contiendas revisadas por la Cuarta Sala, se acogió el 47% de las acciones interpuestas por los trabajadores, mientras que el número de sentencias ‘pro empresa’ alcanzó el 2%. En tanto, el año pasado solo el 20% de las demandas acogidas por la instancia —sin contar los recursos declarados inadmisibles— fue a favor de los empleados, y el porcentaje de sentencias proclives a las empresas llegó al 11% (ver tabla y gráficos). ‘La Sala Laboral de la Corte Suprema ha estado más abierta a aplicar el derecho, sin una postura ideológica o prejuicio ‘pro operario’.
Se ha mejorado la ponderación de un debido equilibrio entre los intereses de ambas partes de la relación laboral (empleador y trabajador), considerando que ambos son protegidos por el derecho’, dice Enrique Munita, socio del estudio Munita & Olavarría, respecto de los datos de 2018. En el marco de esta misma reflexión, el abogado laboralista añade: ‘No cabe duda de que, para que nuestra sociedad funcione adecuadamente, se requiere de ambos, y una postura a priori en pro o en contra de una de las partes afectaría la imparcialidad que debe caracterizar la actuación judicial.
Seguir avanzando en este sentido nos acerca a los criterios aplicados por los tribunales superiores de los países desarrollados’. El informe de Munita & Olavarría también muestra cifras de los cuatro primeros meses de este año, en que incluso se observan cambios jurisprudenciales a favor de las empresas. De un total de 93 causas vistas a abril, el 13% de los fallos son a favor de los empleados y el 18% para los empleadores. Desde el estudio jurídico, sin embargo, recalcan que hay que esperar el resultado completo del año para llegar a la conclusión sobre un giro hacia una tendencia ‘pro empresarial’. La Cuarta Sala de la Corte Suprema hoy está integrada por las ministras Gloria Chevesich y Andrea Muñoz, el ministro Mauricio Silva y la abogada integrante Leonor Etcheberry.
El origen ‘pro operario’
Desde el año 2014, tras varios cambios en su integración, la instancia del máximo tribunal que resuelve materias laborales dio un giro en 180 grados, generando varios fallos en que las interpretaciones pro empresariado que venían de años previos fueron borradas de plano.
La unificación de jurisprudencia que más se cita entre los expertos para retratar el criterio ‘pro trabajador’ con el que venía resolviendo la Corte Suprema son las sentencias que abrieron la puerta a los funcionarios públicos para que recurran de tutela laboral a los tribunales del Trabajo, ante la vulneración de derechos y garantías constitucionales por parte de los empleadores (como la intimidad, la libertad de expresión o la honra). También en esa línea destaca la sentencia que validó la huelga fuera de la negociación colectiva.
Fuente: El Mercurio