En horas de la tarde de este lunes, se llevó a cabo, en las instalaciones de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, el debate entre los candidatos de las cuatro listas que se postulan para ocupar el cargo de consejero en el Colegio de Abogados, elecciones que se realizarán los días 4, 5 y 6 de junio.

Para conmemorar que estas serán las primeras elecciones en incorporar una cuota de género para la representación, fueron escogidas una mujer por cada una de las listas para participar en el debate, siendo Paulina Vodanovic la representante de la lista A “Todas y Todos”, Magdalena Atria por la lista B “De vuelta al Colegio”, por la lista C “Libertades Públicas” estuvo presente Libertad Triviño, mientras que por la lista D “Gremial” Marcela Achurra.

 

Género, diversidad y migración

El debate se inició con la pregunta ¿Cuáles deben ser los próximos pasos del Colegio en el ámbito de la inclusión de género, la diversidad sexual o inclusión de extranjeros?, para las cuales las participantes tuvieron dos minutos para responder.

Para Marcela Achurra, la diversidad es un tema más profundo que sólo un tema de género. Aseguró que por la lista D celebran la ley de cuotas, pero que apoyan también el sistema de cifras repartidoras que asegurará mayores porcentajes de representatividad de la diversidad que hace vida en el Colegio. En el caso de los extranjeros, señaló que es necesario replantearse algún sistema de prueba y de acreditación que permitan incorporar al Colegio a profesionales de otras nacionalidades y de esta manera incrementar el control ético. “Hay que expandir la visión del colegio para que se sientan identificados no solo los tradicionales”, recalcó.

Por su parte, Paulina Vodanovic destacó que si bien la prioridad es la incorporación de más mujeres y jóvenes, lo importante es cómo se realizará. “Uno de los problemas que tiene hoy el Colegio, es que apunta a un segmento de abogados y no representa a todos”, recalcó al tiempo que destacó que en materia de género hay que definir no cuántas mujeres van a participar, sino cuál será su aporte. Entre las propuesta de la lista que representa, señaló que se encuentra la creación de una comisión permanente en materia de Derechos Humanos que pueda abordar temas de migración, diversidad sexual y género, pero además habló sobre la necesidad de crear un protocolo para el abordaje de abusos sexuales en el mundo legal, donde el Colegio pueda regir en materia de control ético.

Al respecto, Magdalena Atria, aseguró que si bien aseguró que con el arduo trabajo realizado para la aprobación de la ley de cuotas se avanzó en gran medida en el Colegio, se necesita más paridad en la mesa del consejo, presidentes e integrantes de comisiones, participaciones en ponencias, seminarios, publicaciones de la revistas y en los lugares donde haya toma de decisiones. Estuvo de acuerdo con la creación de una comisión que vele por los asuntos de diversidad y género, pero recalcó que esta también debe considerar pequeñas incidencias en el mundo legal como los códigos de vestimentas en las oficinas de abogados y el uso de nombres personales en los estudios.

Para la representante de la lista C, Libertad Triviño, se ha avanzado significativamente en temas de género y lo que se busca es que el Colegio se presente y se prenuncie con mayor fuerza en temas de vulneración de derechos fundamentales de grupos tales como los migrantes, personas diversas sexualmente. Para ello propone la creación de una comisión dispuesta  representar los derechos de los pequeños grupos. “No solo queremos que haya más mujeres en el consejo, sino que queremos que nosotros como Colegio de abogados nos avoquemos a terminar con las discriminaciones de géneros existentes en las legislaciones”, señaló.

 

Control ético

La segunda pregunta del debate estuvo enfocada en el papel regulatorio que debería tener el Colegio de Abogados en el comportamiento de los abogados y cómo debería realizarlo. Para la representante de la lista A, el deber del Colegio debe ser perseguir y condenar las faltas éticas, aun más tomando en consideración que estatutariamente tiene funciones en relación a la ética, no solamente debe recibir las denuncias, sino también para dictar normas relacionadas con el honor de la profesión. “Hoy día hay situaciones graves y el Colegio no ha tomado una posturas clara frente opinión pública. Pero además vemos poca proactividad en cuanto a la promoción de la ética”, destaco.

Marcela Achurra, representante de la lista D, aseguró que además de tener un Colegio sancionador, buscan tener uno que ampare el trabajo de los abogados en sus distintos ámbitos. “Queremos que pertenecer al colegio sea un sello y una garantía para quienes contraten los servicios de los colegiados”.

En cuanto a Magdalena Atria, de la lista B, aseguró que el control ético va de la mano con el debate de la colegiatura obligatoria, que permitiría que las fiscalizaciones sean más rigurosas. Propuso realizar con convenio con facultades que permitan fortalecer el tema en las mallas curriculares y con la Corporación de Asistencia Judicial para que sea significativo durante la práctica.

Por otro lado, Libertad Triviño, destacó que las situaciones conocidas durante este año en el ámbito judicial muestran signos claves que dan luces de que se debe reforzar los estándares éticos. “¿Por qué debemos colegiarnos? Porque nosotros como gremio necesitamos autoregularnos, controlarnos. Es necesario que todos los abogados nos rijamos por un código de ética. Nosotros proponemos pasar de una conducta reactiva a una preventiva”.

Entre las medidas que proponen  está fomentar que en las universidades de derecho existan las cátedras de ética, implementar canales de comunicación para que las personas puedan poner en conocimiento al colegio de alguna falta a la ética y que desde el Colegio se patrocinen causas donde la persona sienta que ha sido víctima de la falta de ética de abogados no colegiados. “El tribunal de ética tiene que tener un actuar más acorde con el nuevo código que tenemos”.

 

Colegio nacional y regiones

La tercera ronda de preguntas estuvo enfocada en una de las propuestas que comparten las listas que se debaten por la consejería, relacionada con la creación de un colegio nacional que agrupe a las dependencias regionales y si se logra cómo lograr que labore sin políticas centralistas.

La lista A, representada en el debate por Paulina Vodanovic, está en contra de la creación de un Colegio Nacional argumentando  que la realidad de las regiones está representadas por sus colegios regionales o provinciales, de esta manera la lista propone incentivar la interacción entre ambas sede de manera que se pueda visibilizar las situaciones que ocurren en regiones. “El Colegio debe lograr que las regiones sean oídas, que los colegios regionales sean integrados al Colegio de Abogados de Santiago”, recalcó.

Por su parte, Libertad Triviño, de la lista C, aseguró que hay buenas razones para crear una agrupación nacional, para unificar criterios, estándares éticos, trabajo colaborativo eficiente y tener herramientas que generen puntos de encuentro. “No parece ser atractivo que el Colegio de Abogados se atribuya la representación de todos los abogados de Chile, a nuestro juicio, más que representar políticas centralistas, la idea de una agrupación nacional debe partir desde las propias regiones y debe darse en términos de igualdad”, explicó. Resaltó que tal vez la solución sería una mesa de trabajo nacional, respetando la autonomía de cada colegio.

Por la lista D, Marcela Achurra, aseguró que se pueden considerar consejeros regionales que garanticen una adecuada representación de las regiones, tomando en consideración que cada región presenta realidades distintas, de esta manera se podría realizar una reforma al estatuto para que se le dé mayor representación a los intereses de cada región.

En cuanto a la lista B, Magdalena Atria, aseguró que la lista conversó ampliamente el tema y consideraron que es un tema que está naciendo nuevamente desde Santiago y no desde las regiones. “La verdad es que la tendencia va a otro lado, hacia la autonomía, descentralización, regionalización”, de esta manera considera que un colegio nacional es una idea impracticable, “pero si sentimos que estamos al debe en temas de coordinación con los colegios regionales”.

 

Afiliación al colegio

La cuarta y última pregunta del debate estuvo enfocada en las propuestas de las listas para la captación de nuevos, tomando en cuenta que año tras años se titulan cerca de 4000 jóvenes, de los cales una cuota muy minoritaria se suma al colegio.

La representante de la lista “Todas y Todos, señaló que hay un índice bajo de colegiatura sobre todos de los jóvenes quienes argumentan que el colegio no los representa, “nosotros como lista estamos convocando a trabajar, a participar. Nuestra idea es poner temas de interés y convocar a los colegas a que se integren al colegio, que participen activamente en comisiones como la que pensamos crear en Derechos Humanos”.

Achurra, por la lista D “Gremial”, destacó que si bien exigir la colegiatura para todos es un tema inviable ya que requeriría una modificación a la Constitución, incentivarla es un tema más fácil de abordar e incrementar la afiliación con el apoyo de empresas, universidades, los colegios, estudios, las organizaciones sociales quienes vean en el colegio un sello diferenciador . “A muchos de los que le hemos preguntado por qué no está colegiado, aseguran que desconocen los beneficios que la colegiatura les trae, ahí hay un rol de difusión que nosotros tenemos que de alguna manera gestionar”.

Por la lista C “Libertades Públicas”, Triviño aseguró “el colegio ha dejado de ser representativo para los abogados y eso genera un circulo vicioso que hace que los abogados no se colegien, de esta manera el colegio comienza a estar más alejado de los jóvenes, de las mujeres y de los abogados de regiones. Creemos que hay una falta de presencia del colegio a nivel nacional, tenemos que tomarnos estas instancias, tenemos que opinar, tenemos que entrar al debate”.

Es por ello que proponen la creación de un comité de desarrollo profesional que promueva actividades de mentoría y de contacto de redes laborales, la idea es que no solo ayude el desarrollo profesional sino que se realice con estándares de calidad.

Al respecto, por la lista B “De vuelta al Colegio”, Atria expresó que promover más paridad y más diversidad en el colegio es relevante para poder motivar una mayor participación y colegiatura. “Hay que facilitar la colegiatura, ideas como la de no cobrar los dos primeros años y permitir que los abofados jóvenes vayan a las reuniones de los martes, puedan publicar en la revista, puedan ir a la biblioteca, participar en las comisiones, permita que puedan ver que si les puede servir estar colegiado. A ellos se le suma rebajar los costos por reincorporación”.