El presidente Haroldo Brito sostuvo que la Corte Suprema dio cumplimiento a todas las etapas que le corresponde en el proceso de elección de un nuevo ministro del máximo tribunal, al ser consultado por el retiro de la nominación de la ministra Dobra Lusic, antes de la votación en el Senado.

«La corte entiende que participó completamente en la fase que le es privativa, en la recolección de los antecedentes, el llamado a concurso y esa primera fase concluyó con la preparación de la quina. La Corte Suprema ha venido haciendo cambios a lo menos hace diez años en esta clase de concursos con algunas medidas internas, que no tienen el carácter de legales. Por ejemplo, los ministros hacemos públicos los votos, se fija la audiencia para la votación con muchísima anticipación, hay petición de antecedentes relativos a fallos con el propósito de que los ministros al momento de resolver estas materias tengan a la vista antecedentes de carácter jurisdiccional y profesional, su contenido, para emitir el voto de que se trata», informó el presidente Brito.

La máxima autoridad del Poder Judicial agregó que «(…) también es sabido por ustedes que hay un acuerdo y una necesidad de resolver los problemas de los concursos. Resolver las postulaciones prescindiendo de las audiencias personales, en el entendido de que los antecedentes están todos en nuestro sistema interno».

«La Corte Suprema tiene tranquilidad en cuanto a que nos hemos sujetado y constreñido a lo usual, de modo que habiendo culminado esa etapa, la segunda etapa ante el Ministerio de Justicia, la Presidencia de la República y el Senado, lo ocurrido es una cuestión que han debido valorar esos otros actores. La corte tiene participación exclusiva en la confección de la quina y eso es lo que se hizo», afirmó.

En el encuentro con los medios, el presidente Brito dijo que en el proceso de selección de los ministros de la Corte Suprema es importante la participación de los tres poderes del Estado. «Se trata de cumplir altas funciones jurisdiccionales y por eso debe estar comprometido todo el Estado», remarcó.

Respecto de los fallos que se solicitan a los candidatos al máximo tribunal, respondió que «se trata de que el postulante tenga la posibilidad de mostrar lo que le parece más adecuado, y se adoptan algunas decisiones que tienen mucha trascendencia. Lo que se ha pretendido es la capacidad de conocer cómo resuelven, porque se trata de buscar a los postulantes que tengan una formación técnica adecuada a las funciones que se deben cumplir».

«Este concurso nos ha abierto y nos está convocando a revisar con mucho cuidado lo que estamos haciendo. Tengo la convicción de que la Corte Suprema ha actuado dentro de los protocolos conocidos por todos y eso es una cosa positiva. Pero, por cierto, estamos pendientes de lo que se opina por las personas que conocen este tema de la jurisdicción. Hay muchísimas cosas que podrían ser incorporadas, lo que pasa es que hay que enfrentarlas con la calma que exige toda reforma. Pero es un buen momento para ocuparnos de este tipo de cosas», concluyó.